1Timoteo 2:1, ¿involucra a los fallecidos para orar?

1Timoteo 2:11 orar por fallecidos

En 1Timoteo 2:1 tenemos una exhortación de parte del apóstol Pablo, con la finalidad de que estemos en tranquilidad y podamos llevar una vida piadosa que permita a los no creyentes conocer al Salvador. Pero algunas personas asumen a partir de este texto que los fallecidos han de estar involucrados aquí, o bien para que reciban nuestras oraciones e intercedan por los vivos, o que se pueda orar a Dios por ellos. Así que en este artículo respondemos a esta pregunta si 1Timoteo 2:1 habla de orar por fallecidos.

¿Los fallecidos en la intercesión?

Uno de los dogmas de la iglesia católica de Roma es la comunión de los santos. Esto es creer que la iglesia está compuesta tanto por quienes han fallecido, como por quienes están en la tierra todavía. A unos se les llama iglesia triunfante, y a otros iglesia militante, respectivamente. Esto, según la doctrina católica, haría partícipes tanto a unos como a otros en cada cosa que involucre a la iglesia, haciendo parecer lógico que si los vivos oran, los fallecidos deberían hacerlo también. Así que teniendo lo anterior como base, revisemos si nuestro texto de 1Timoteo 2 justifica estas prácticas.

¿Orar a los fallecidos?

Para nadie es un secreto que en el catolicismo romano se les da relevancia a los fallecidos, de tal manera que se precisa la oración por ellos. El catecismo enseña: «La Iglesia peregrina, perfectamente consciente de esta comunión de todo el Cuerpo místico de Jesucristo, desde los primeros tiempos del cristianismo honró con gran piedad el recuerdo de los difuntos y también ofreció por ellos oraciones…»   (#958), Es decir, por un lado se le da valor al hecho de orar directamente a Dios por los difuntos, es decir, en favor de ellos. Otros, de manera distinta, creen que se les pide directamente a ellos (no a Dios) para que éstos a su vez intercedan ante Dios en favor nuestro. Así, alguien me escribió en twitter afirmando que los santos (que en la iglesia católica son la iglesia triunfante), oran en favor de los vivos, y usó para ello nuestro texto de 1Timoteo 2:11.

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¿Qué opinamos de esto? Ya que suelen usar este texto de 1Timoteo 2:1 para validar estas acciones, vamos a revisarlo para saber si este texto, en su contexto, permite tal enseñanza.

¿Qué dice 1Timoteo 2:1?

En este texto, Pablo exhorta a que se hagan oraciones. Pero todo no debe quedar allí sino que hay que mostrar el contexto completo para saber porqué lo dice. Cito la versión NVI, que dice:

Así que recomiendo, ante todo, que se hagan plegarias, oraciones, súplicas y acciones de gracias por todos, especialmente por los gobernantes y por todas las autoridades, para que tengamos paz y tranquilidad, y llevemos una vida piadosa y digna. Esto es bueno y agradable a Dios nuestro Salvador, pues él quiere que todos sean salvos y lleguen a conocer la verdad. Porque hay un solo Dios y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre, quien dio su vida como rescate por todos. Este testimonio Dios lo ha dado a su debido tiempo…

Ya colocado aquí el texto, revisemos para saber si puede o no ser aplicado en defensa de la oración involucrando a los fallecidos. Comencemos.

Que se hagan oraciones

La oración es el acto de hablar con Dios, pedirle o invocarle. En toda la Biblia la oración sólo va dirigida a Dios, quien puede garantizarla mediante sus atributos de omnipresencia, omnisciencia y omnipotencia. No hay ninguna enseñanza de orar a alguien distinto a Dios. De hecho Dios acusa a quienes oran a alguien distinto (Is 45:20). Esto anula toda posibilidad de orar a María o a cualquier otro fallecido.

… por Todos

Estas oraciones han de ser por todos. ¿Involucra esto la posibilidad de orar por fallecidos? El mismo contexto nos dice: «especialmente por los gobernantes y por todas las autoridades, para que tengamos paz y tranquilidad». Esta frase alude necesariamente a los vivos. ¿Se imaginan que oremos por los gobernantes fallecidos para que hoy tengamos paz? Esto no tiene sentido. Mucho menos que debamos orar por Hitler, Mao, Stalin, Nerón o cualquier otro gobernante de loa que sabemos que impíamente se comportaron provocando toda clase de mal contra otros. Así, esto no involucra a orar por fallecidos.

… para que tengamos paz y tranquilidad

La oración es con un propósito. Pablo habla aquí de que podamos vivir en paz con nuestros semejantes. No debe usarse este texto para pedir a un fallecido por un favor para alguien, ni orar a Dios para pedir por el alma de un fallecido. Este texto no nos da esa posibilidad.

… pues él quiere que todos sean salvos

La paz y tranquilidad apuntan al deseo de Dios de la salvación. Dios desea que se hagan oraciones por todos los vivos para que ello redunde en paz y tranquilidad, a fin de que todos sean salvos. Podemos ver aquí la importancia del contexto cuando nos referimos a un versículo.

Porque hay un solo Dios y un solo mediador entre Dios y los hombres

Y este texto es el tiro de gracia: hay sólo un mediador que sirva de puente entre nosotros los humanos, y Dios. Ese puente es Jesucristo. Esto niega toda enseñanza del catolicismo que pretenda orar a alguien para llegar a Jesucristo, o tratar de llegar a Jesucristo a través de un tercero, pues si Jesús es mediador entre Dios y los hombres, es innecesario e incluso herético orar a alguien para ir con Jesús cuando ya el acceso a Él es directo.

La Biblia enseña lo contrario

Ya concluido en que este texto de 1Timoteo 2:1 no enseña el orar por fallecidos ni a «santos» (como erróneamente se enseña en el catolicismo romano), hay que destacar el hecho de que la Biblia enseña lo contrario a lo que nuestros amigos católicos piensan. Primero, la Biblia enseña que la oración es sólo a Dios (ver Jn 14:14, Mt 6:19; Hch 7:59). Segundo, la Biblia prohíbe que se consulte a los fallecidos (ver Deut 18:11; Isa 8:19; 2Samuel 28:7-21). Tercero, cuando un católico busca orar por un santo a uno de ellos, es buscando su intercesión, pero el católico debe hacerse una muy sincera pregunta: ¿por qué no pedir directamente a Dios? ¿Puede acaso un fallecido hacer algo que Dios no pueda hacer? ¿Puede un fallecido amarle más que el Dios que envío a su Hijo a morir en la cruz? La Biblia habla de la intercesión de Jesucristo (Rom 8:34), ¿puede la intercesión de un fallecido ser más eficaz? También se habla de la intercesión del Espíritu Santo (Rom 8:26,27), ¿puede ser más eficaz la intercesión de un fallecido?

Si desea una comprensión más amplia sobre la intercesión, recomiendo el post «La Intercesión de los santos ¿Qué dice la Biblia?«.

Que el Señor le bendiga.

Acerca del Autor

Juan Valles
Juan Valles
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Teólogo en formación, predicador del evangelio; apasionado por la apologética y la doctrina cristiana; se dedica al estudio de sectas y movimientos religiosos. Está casado y reside en Caracas.

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